martes, 21 de agosto de 2007

VIP (bi -hay- 3,14)

Este va para todos aquellos que se creen la gran cosa y no salen ni en el con-flex (o corn flakes por aquello de los puristas del idioma).
El domingo pasado me encontraba dedicándome a la contemplación y el reposo en mi choza cuando mi celular emitió el timbrecito de restaurante chino, asi suena cuando le entra un mensaje, el típico din-don que se escucha cuando se asoma el medio cantonés por la ventanilla, y uno hasta que brinca de la felicidad. Una mala junta invocándome a ir al cine, cosa que me llamó la atención pues normalmente nuestros encuentros involucran alguna actividad en la que el consumo de alcohol es casi asegurado. Me sonó la idea de algo sanito y tranqui así que me enrumbé en el perico a buscar a mi compa pues andaba a pata. Tuanis ser cortés o como diría mi amigo“el hombre en la relación” ja ja. El asunto es que se nos ocurrió la idea de jugar de importantes y aventurarnos a comprar tiquetes en la zona bi/ hay/ 3,14 (o mejor dicho VIP). Los dos éramos vírgenes en ese aspecto así q nos pareció interesante hacer el tanteo en esos lares. Les cuento un poco la peripecia. Para empezar, los bi hay pís no tienen que hacer la fila hedionda que se mama el resto de la plebe pues cuentan con una boletería por aparte, el mal toque fue que nos enteramos de ese detalle después de habernos mamado la fila de los plebes y llegamos a la ventanilla donde el muy amable caballero de la boletería nos hizo ver que estábamos mamando. Osea la fila enorme fue en balde. Haciéndonos los muy dignos y con el rabo entre las piernas nos fuimos para la boletería bi hay pí donde la fila era considerablemente más corta, sin embargo no se movía tan rápido como la de la plebe. Mientras esperábamos empezamos a cuestionar qué tan apropiado era nuestro look y si teníamos pinta bi hay pí. Mi compa andaba en panta y tennis y yo con jeans y una blusilla normal, lo único que me salvaba según él, eran mis zapatos metrosexuales-finolis (q nunca he sabido si me lo dice al chile o en son de burla). La fila se estaba tardando tanto que empezamos a teorizar si era q a uno le preguntaban nombre y apellido, profesión, le pedían orden patronal o qué putas para ver si uno era un verdadero bi hay pí y merecía estar en ese lugar, xq al chile se tardaba mucho con cada cliente, pero ni modo, ahí estábamos. Cuando llegamos a la ventanilla nos dimos cuenta q es q le sacan a uno un croquis virtual de la sala de cine donde uno decide en cuál sillón quiere posar sus sentaderas para ver la movie. Escogimos los asientos y el mae nos dio los tiquetes. Me sentí como en una sala de abordaje xq el maesillo nos dijo, es en la sala tal en el asiento tal a la hora tal, y encerró todo en circulitos con el lapicero como le hacen a uno en los tiquetes de avión wara level, aún me sentía fuera de lugar. Resulta que la jama que venden en esa parte es diferente a la de la chanfurria. Claro lo enverduran por todo lado xq todo es carísimo, pero venden sushi, unos guches todos finolis,crepas y hasta un bar tienen adentro. La vara es q tuvimos q esperar un gran rato xq llegamos muy temprano entonces nos sentamos de pata cruzada en los cómodos sillones de la sala de espera bi hay pí, mientras yo le rascaba la jupa a mi amigo y hablábamos corrientadas. Entramos al cine y nos sentamos los que creíamos eran nuestros asientos, hasta q llegaron un par de bi hay pís y nos sacaron de nuestro error (y de los asientos). Ni modo a buscar cuáles eran de verdad… La vara es que los tales sillones son cómodos y tienen la jugada para poner los pies y todo, pero tienen el defecto de que lo q los divide no se puede levantar ni quitar asi que el asunto de ir a ligar al bi hay pí queda descartado, nada de toqueteos indecorosos o abrazos “fraternales”, si tan sólo hubieramos sabido eso antes….. (historia aparte). Empezamos a comer gente, deporte que mi acompañante y yo solemos practicar. Pudimos notar que el tal bi hay pí se llena de gente que llegan a jugar de exquisitos pues entran con sus vasitos de vidrio con whisky, o con cocteles todos aplayados con cerezita y piña, uuyyyy me enferman. Osea yo digo si uno va al cine va al cine, y si va a tomar guaro va a eso. Igual con el sushi. Mae, es una delicia y me encanta, pero nada q ver ir al cine a jamar esa vara. Y es que eso de los bi hay pís toda la vida me ha molestado. Osea quién decide quién putas es importante y quién no? Por qué la “I” no puede ser utilizada para describir a gente Imbécil, Inútil, Ignorante, incluso Inteligente! Esa patraña de ser una “Very Important Person” es una clasificación totalmente excluyente y sin sentido valga decir. En todo caso me vale una anona si me sientan en una silla más cómoda, o si hago menos fila. El bi hay pí lo hace uno en su mundo con sus compas, con su familia, en el brete y en el chante. No porque ningún pelele, pelafustanes se le ocurre que uno tiene el tarro o la harina para estar dentro de ese mundillo, que en todo caso se reduce a un simple tiquete con tres letritas que para quien no es NADIE significan TODO.

2 comentarios:

Mario García dijo...

oooohhhh...que vip me siento escribiendo de primero (que plumero) tenes toda la razón estimadisima equina, además creo que lo "vip" le quita la alegria a muchas cosas, porque vivs para mantener o manejar una apariencia, es como ponerle Directv a un tugurio, o frenillos a una chancha..no sirve de nada. Como dirían los aterciopelados "Mira la esencia no las apariencias"....Y sencillamente, estoy harto de las apariencias excluyentes (viva la vida)! Saludos!!

BorisAlonso dijo...

wata level, veri idiot person
jugando de exquisitos, me recuerdan a mi compa hendell
saludos bestia peluda

 
Diseñada por Free Blogger Skins - Modificada por JGM